GETAFE, España (EFE).- Cuando sólo restan algunas horas para el regreso de Roberto Abbondanzieri a la Argentina y su reincorporación a Boca, el arquero se despidió de sus compañeros de Getafe y habló sobre cómo se desarrolló su pase, su futuro en el club de la Ribera y la posibilidad de regresar al seleccionado nacional.
Pregunta: Parece que lo de ir a Bouquet a trabajar el campo se va a retrasar dos años ¿Tanto merecía la pena volver a Boca?
Respuesta: Boca apareció en el momento que no esperaba. La primera llamada de Bianchi fue algo espectacular. Siempre teníamos relación y que me llamara para volver me tocó demasiado. Boca puede hacer esperar un poco más mi deseo de ir al campo. Vale la pena. Más allá de que son dos años de contrato, me gustaría retirarme allí.
P: Una de las causas por las que vino a Getafe fue por el asedio mediático que hay en la Argentina. Buscaba tranquilidad. ¿No le da un poco de vértigo volver a la vorágine de un equipo grande?
R: No sólo la prensa. En el fútbol, en cualquier sitio, la prensa va a tener presión. Fue por eso, pero también porque era un club grande. Allí exigen campeonatos, como pasa aquí con Barcelona o Real Madrid. Eso cansaba la mente. Ganabas un campeonato y en el próximo torneo tenías que empezar ganando porque te podían machacar. Eso durante tanto tiempo me cansó, pero no por la prensa.
P: Entonces, ¿en dos años y medio en Getafe tomaste oxígeno para volver?
R: Aquí fue diferente. Salir a la calle. Vivir con mi familia... Aquí se vive menos el tema de las concentraciones. Dos años valen la pena.
P: El pase fue como un parto. Parecía fácil pero a la vez muy difícil... ¿Qué pasó?
R: Parecía sencillo porque me quedaba muy poco tiempo en el club. Al no tener el contrato firmado hasta que el equipo se salvara, había dudas. Ahí apareció Getafe de nuevo, cuando en realidad es cierto que necesitaban un arquero. Tenían a Ustari lesionado y una posición en la tabla difícil. Se complicó porque Getafe quería lo suyo y Boca, al saber que el jugador iba a estar libre en cuatro meses, tampoco quería pagar demasiado dinero. No sé si las dos partes tenían razón. A Getafe le quitaban el arquero titular. Las negociaciones son así. Lo más negativo que me llevo de esto es que estuve en medio de ellas.
P: Tal vez el momento clave llegó cuando el presidente de Getafe bajó a la cancha y le dio dos besos. ¿Ahí supo que el problema terminó?
R: Yo ya había hablado la noche anterior con él. Le dije que quería hacer una rueda de prensa y que estuviera conmigo. Le pregunté si iba a venir al entrenamiento y me sorprendió que me dijera que no y después apareciera. Para que se sepa, el presidente lo hace para que se sepa que nuestra relación, más allá de lo que sucedió esa semana, va a seguir igual. Es una demostración porque a veces no se puede demostrar a la gente como se llevan las personas. El, saliendo a la cancha, estando los periodistas, es algo como para decir que está todo bien.
P: Volviendo a Boca... ¿Tiene más proyección que en Getafe para convencer a Maradona?
R: En su momento me tocó no ser convocado apenas llegó Maradona. Mi pensamiento es jugar bien en Boca. Con la selección, creo que puedo llegar a jugar bien el Mundial, pero ahora tengo un reto importantísimo que es Boca.
P: Su primer partido puede ser ante River Plate... ¿Ansioso, o nervioso?
R: Llego en plenitud. Estoy bien físicamente y son decisiones del entrenador. A ver si puedo jugar el domingo. Todos quieren jugarlo. Es de los partidos más lindos.
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