LA MODESTIA DE PEP

no de los detalles que más significativamente me llamaron la atención de la fiesta del doblete en el Camp Nou fue la modestia con que Guardiola está asumiendo su papel de líder de este nuevo Barça triunfal. El entrenador blaugrana no quiso acaparar el protagonismo y cedió todos los honores a los futbolistas, en una actitud casi reverencial, muy similar a la que protagonizó Rijkaard hace tres años. Se trata, sin duda, de una manera de entender el liderazgo sin soberbia, sin petulancia, apostando por la unidad del grupo por encima del lucimiento personal. Guardiola sabe que él tiene gran parte del mérito -por no decir casi todo- del éxito de esta temporada, pero ha decidido compartirlo, solidariamente, con los futbolistas que tan bien han recorrido el libro de ruta que les ha trazado el entrenador.

Este Barça doble campeón de Liga y Copa y finalista de Champions no hubiera sido posible sin la intervención decisiva de Guardiola. El técnico ha devuelto a una plantilla que llevaba dos años perdida en la autocomplacencia el hambre de victoria, la disciplina táctica y, sobre todo, el compromiso con un proyecto deportivo basado en el fútbol espectáculo. Nadie en el mundo puede negar que el Barça practica el juego más exquisito del planeta. Y, además, lo hace con un rendimiento excelente, como lo demuestran los títulos ganados. Pep, que conoce el vestuario, el club y el entorno del Barça como el mejor, ha intervenido con la precisión de un cirujano para cambiar la historia de este equipo, que vuelve a ser el orgullo de todos los culés. Culés como el propio Guardiola, que prefirió quedarse durante la fiesta en un segundo plano para disfrutar como un espectador. Aunque todos sabemos que su papel ha sido determinante a lo largo de toda la campaña.

Y todavía lo será, porque Guardiola quiere ganar la Champions el próximo miércoles en Roma. Por eso pidió un esfuerzo a sus jugadores y aseguró que esta plantilla no nos fallará. Sobre todo porque al frente de ella hay un entrenador convencido de que su modelo futbolístico puede hacer historia con el triplete.

Hasta mañana. Salud y suerte.